Contrato de relevo: un ejemplo para entenderlo mejor

En el ámbito laboral, uno de los temas que genera más dudas y confusiones es el contrato de relevo. Este tipo de contrato se utiliza cuando una persona próxima a jubilarse es sustituida por otra más joven, con el objetivo de asegurar la continuidad de la empresa y facilitar la transición generacional.

En este artículo, vamos a explicar detalladamente qué es un contrato de relevo y cómo funciona a través de un ejemplo práctico.

¿Qué es un contrato de relevo?

Un contrato de relevo es un acuerdo laboral que se firma entre el trabajador próximo a jubilarse (relevado) y el nuevo empleado que lo sustituirá (relevista). Este tipo de contrato se rige por el Estatuto de los Trabajadores y tiene como finalidad garantizar la continuidad de la actividad empresarial y fomentar la contratación de personas jóvenes.

Ejemplo de contrato de relevo

Supongamos que en una empresa de fabricación de muebles, Juan, de 63 años de edad, se encuentra próximo a jubilarse. La empresa decide contratar a Pedro, de 30 años, como relevista para asegurar la continuidad del negocio.

1. Acuerdo entre Juan y la empresa:

Juan se reúne con el departamento de recursos humanos de la empresa para acordar los términos de su jubilación y el contrato de relevo. Se establece que Juan se jubilará a los 65 años de edad y que Pedro comenzará a trabajar como relevista a partir de la firma del contrato.

2. Contrato de trabajo de relevo:

La empresa redacta un contrato de trabajo en el que se establecen las condiciones laborales y salariales de Pedro como relevista. Se incluyen cláusulas específicas relacionadas con el contrato de relevo, como la duración del contrato, la jornada laboral y las funciones a desempeñar.

3. Duración del contrato:

El contrato de relevo tiene una duración determinada y está vinculado a la jubilación del trabajador relevado. En este caso, el contrato se establece por un periodo de dos años, que coincide con el tiempo que le falta a Juan para jubilarse.

4. Jornada laboral:

Pedro trabajará a tiempo completo, al igual que Juan, con una jornada de 40 horas semanales. Se establece que Pedro deberá realizar las mismas tareas que Juan y recibir la formación necesaria para desempeñarlas correctamente.

5. Salario y condiciones laborales:

Pedro percibirá un salario equivalente al de Juan, de acuerdo con su categoría profesional y antigüedad en la empresa. También disfrutará de los mismos beneficios laborales, como días de vacaciones, permisos y seguros.

El contrato de relevo es una herramienta que permite la transición generacional en las empresas y garantiza la continuidad de la actividad económica. A través del ejemplo mencionado, se puede entender mejor cómo funciona este tipo de contrato y cómo se establecen las condiciones laborales entre el trabajador relevado y el relevista.

Es importante destacar que el contrato de relevo ofrece ventajas tanto para el trabajador próximo a jubilarse como para el nuevo empleado, ya que promueve la contratación de jóvenes y asegura una transición suave y eficiente en el ámbito laboral.

En resumen, el contrato de relevo es una alternativa viable para asegurar la continuidad de las empresas y fomentar la contratación de nuevos talentos.